Una técnica inédita

[vc_row][vc_column width=»1/1″][vc_column_text] [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=»1/4″][vc_single_image media=»58442″ media_width_percent=»100″][/vc_column][vc_column width=»3/4″][vc_single_image media=»58477″ media_width_percent=»100″][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=»1/4″][vc_single_image media=»55840″ media_width_percent=»100″][/vc_column][vc_column width=»3/4″][vc_column_text]En los alrededores de la tumba del “Primer Emperador” se descubre una fosa con 46 aves acuáticas (gansos, cisnes). Son esculturas huecas de bronce realizadas en varias partes. Para hacer la decoración exterior se cubre la estatua con una capa negra de carbón y huevo y después se graban las plumas. [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]