El Templo A
Gran edificio que consta de un pórtico precedido por dos columnas, un cuerpo central dividido en tres naves y dos habitaciones situadas al fondo. No se conocen sus dimensiones totales pues no se conserva la parte trasera por la erosión.
Su carácter sacro viene avalado por su monumentalidad, la distribución del espacio y los materiales encontrados en su interior, entre los que destacan un fragmento de escultura humana y varios fragmentos de pebeteros de cabeza femenina. [/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/3″][vc_icon icon=»fa fa-audio-description» size=»fa-5x»][/vc_icon][vc_column_text] [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]