Diferentes tipos de cuentas o calculi. Se trata de fichas de arcilla, de tamaño muy pequeño y formas diversas: discos,  conos, esferas, formas bicónicas, etc. Cada forma representa un tipo de mercancía o producto (cereales, cabras, ovejas, prendas de tejido,…).  Se guardaba en bolas esféricas de arcilla (“bulla”). Su origen se remonta al Neolítico. En fases más evolucionadas, se relaciona con el origen de la escritura dado que su silueta, diseñada en la superficie de las bullae, serán los primeros pictogramas de la escritura mesopotámica.